Resumen de la entrevista realizada para el programa "Egunon Euskadi", de ETB-2. (29/marzo/2010).
En primer lugar, consideró necesarias las reformas legales que pretende el Gobierno porque el principio político y democrático avalado por el Tribunal de Estrasburgo sostiene que, mientras hay violencia, no puede permitirse a los amigos y a los que amparan la violencia jugar en la política en las mismas reglas que amparan a los otros.
Por otra parte, desde un punto de vista táctico, estas medidas están produciendo una evolución en la llamada izquierda abertzale hacia el fin de la violencia que nunca se había producido en los 20 años anteriores.
La izquierda abertzale se está moviendo en función de que la Ley no les permite jugar en política como lo había hecho en años anteriores.
El proceso es bueno, tácticamente, pero también es bueno democráticamente, porque lo avaló el Tribunal de Estrasburgo.
Pienso que lo que hacía falta era corregir algunas cosas que se están produciendo mal porque ese movimiento utilizaba siglas tapaderas para volver a estar presente en el juego político.
Lo que la ley pretende corregir es precisamente ese problema: que utilicen siglas tapadera para volverse a presentar violando lo que la ley pretendía.
Sobre las declaraciones de Mayor Oreja.
Estas declaraciones, acusando al Gobierno de hallarse en una fase de negociación con ETA, ha impulsado al Grupo socialista en el Parlamento Europeo a hacer llegar las declaraciones al resto de compañeros para dejar constancia.
Ya el mismo día, los europarlamentarios socialistas afirmamos, que Mayor Oreja hacía un daño muy grande en la unidad de la lucha contra el terrorismo y también a la verdad, que mentía al hacer esas declaraciones que pretendían, nada más y nada menos que atribuir una intencionalidad política partidista y electoral al PSOE y al presidente del Gobierno, atribuyéndole una supuesta negociación con ETA.
Yo creo que era necesario trasladar al conjunto del arco parlamentario europeo, darles una información que refutara la afirmación que había hecho Mayor Oreja y, las afirmaciones de una parte y de otra, contra esa manifestaciones de Mayor Oreja.
No es bueno que en la fase actual de tratar de ir juntos para construir un final a la violencia entre dos partidos tan importantes como el PSOE y el PP, surjan tantas diferencias.
Lo mismo que me parece penoso que no tengamos una coincidencia política con el PNV y con el mundo nacionalista democrático sobre la necesidad de articular una política de no permisión de juego político a los llamados brazos políticos de la violencia.
Pienso que existen dos elementos, dos grandes diferencias que son las sospechas que el PP vierte sobre el Gobierno del PSOE, sobre una supuesta negociación, sospechas falsas, o sobre la ausencia de una coincidencia estratégica sobre la necesidad, la justicia, y la conveniencia de apartar al entorno político de la violencia del juego político, mientras la violencia persiste.
Y son diferencias importantes porque creo que estamos, sinceramente, en un momento interesante para que ese declive que todos apreciamos como irreversible y casi definitivo en la violencia, pudiera llevarnos a un escenario de paz definitiva.
Sobre el Nuevo Gobierno vasco.
Considero que se puede valorar positivamente los primeros meses de andadura del Gobierno vasco, ya que tiene muy buen aspecto y que ha iniciado el cambio político con acierto, con firmeza, con liderazgo, y con un discurso de cercanía a las víctimas probablemente desconocido.
Lo que le falta probablemente al Gobierno vasco, en este momento, es una estrategia de combate a la crisis articulada con el conjunto del país.
El Ejecutivo de Vitoria está haciendo sus trabajos, su tarea, y creo que, a poco tiempo que pase, cuando pase este verano, se irá viendo el relato político de este Gobierno.