24 de septiembre de 2015

"Con la paz en Colombia llega la enorme tarea de reconstruir la convivencia"


Notas de prensa 
Jueves, 24 Septiembre 2015

Tras el anuncio de principio de acuerdo de paz entre Colombia y las Farc, el eurodiputado y presidente de la Asamblea parlamentaria UE-América Latina (Eurolat), Ramón Jáuregui, celebra el el paso crucial que pondrá fin al mayor conflicto armado en Latinoamérica, que ha causado más de 220.000 muertes y millones de desplazamientos.

Jáuregui ha trasladado su felicitación al gobierno de Juan Manuel Santos y al pueblo colombiano, y ha agradecido el papel desempeñado por Cuba y el resto de países mediadores durante todo el proceso de negociaciones, iniciadas hace casi tres años.

El presidente de Eurolat ha puesto en valor la decisión de aquellos que durante años y años, casi una vida entera, creyeron que el uso de la violencia era legítimo y útil, y que hoy abandonan la violencia y abrazan a la democracia. “La historia demuestra que los votos siempre ganan a las armas. Con la paz llega la enorme tarea de reconstruir la convivencia". Asimismo, ha transmitido todo su apoyo al pueblo colombiano "que tanto ha sufrido, que ha vivido esta tragedia de muerta y dolor durante cincuenta años.

El dirigente socialista ha pedido a todas las fuerzas políticas colombianas "altura de miras y generosidad porque la implementación de los acuerdos de La Habana exigirá todos mucha comprensión mutua y la recuperación de la convivencia, seriamente deteriorada por tantos años de conflicto". A este respecto, ha destacado el papel clave que desempeñarça la sociedad colombiana en esta reconstrucción y que deberá emprender desde la tolerancia, recordando a las víctimas y sin olvidar la verdad de lo ocurrido", ha manifestado.

Ramón Jáuregui ha animado a las partes a hacer todo lo posible por lograr cuanto antes la firma del acuerdo definitivo, “que acabará con un conflicto que ha causado demasiadas desgracias".

Por último, Jáuregui ha recordado que además de las víctimas mortales alrededor de 55.000 personas han resultado afectadas por algún acto terrorista y otras 11.000 han sido víctimas de las minas antipersona. Además, 130.000 han sufrido amenazas, cerca de 75.000 han perdido algún bien y más de 21.000 han sido secuestradas, sin olvidar que se contabilizan 25.000 personas desaparecidas y 1.754 víctimas de la violencia sexual.